La calidad de tu producto o servicio es un factor muy importante para la rentabilidad de tu negocio. Por eso, tus procesos de control de calidad deben ser estrictos y detallar cada aspecto que influye en el resultado final de lo que vas a comercializar, por eso es conveniente utilizar un diagrama de causa y efecto.

El diagrama de Ishikawa fue creado para solucionar fácilmente un problema específico dentro de la organización. El método destaca por la segmentación del inconveniente; se divide en pequeñas partes asumibles y se intenta atajar el problema.

Hay que analizar cada uno de los departamentos de  trabajo, las posibles causas que lo generan y las acciones que hay que planificar para solucionarlo. Al ser un procedimiento muy visual facilita su comprensión y permite alcanzar soluciones efectivas rápidamente.

¿Qué es y para qué sirve?

Su creación fue en los años 40, con el objetivo de ofrecer una alternativa para analizar por qué un producto o servicio no funciona bien, identificando todos los factores que pueden afectar su elaboración.

Conocido también como diagrama de causa y efecto o de espina de pez, el diagrama de Ishikawa es una herramienta de mejora continua enfocada en la calidad, que muestra todas las posibles causas que existen detrás de un problema o efecto determinado. Al implementar este gráfico en tu empresa, podrás identificar, corregir y mitigar errores, problemas e imperfecciones generadas en la manufactura de un producto o en el proceso correcto de un servicio.

¿Por qué implementarlo en tu empresa?

Al realizar un análisis con el diagrama de causa y efecto no solo se gestiona mejor el control de calidad de los procesos, productos y servicios de tu empresa, sino que también te sirve para:

Te interesará  ¿Cómo contar historias para captar la atención de tu público?
  • Llegar al fondo de un problema, analizando todos los detalles de su proceso.
  • Identificar posibles fallas en el sistema de calidad de tu empresa y oportunidades de mejora.
  • Entender en qué parte de un proceso se están cometiendo errores que ocasionen que el producto o servicio final no sea el adecuado.
  • Determinar los recursos que necesitarás para llevar a cabo un proceso o resolver tu problema.
  • Eliminar futuros problemas de raíz.

Problemas con delivery en restaurante – Ejemplo

Un restaurante viene recibiendo diversas quejas por su servicio de delivery. Los tres principales problemas son:

  • Pedidos incorrectos.
  • Demoran más de lo normal.
  • Pedidos llegan dañados.

El dueño decide abordar el problema para encontrar soluciones con el diagrama de espina de pescado de las 6M. Empiezan con una lluvia de ideas, donde encuentran diferentes motivos como: el uso del embalaje incorrecto que provocó daños durante el tránsito, dirección indicada en el producto no era correcta, zonas de mucho tráfico, entre otros.

Finalmente, se presentan las siguientes propuestas para mejorar el servicio de Delivery:

  • Revisar las denominaciones de los productos y sus recetas, y realizar las modificaciones necesarias para que cada producto tenga una identificación única.
  • Reforzar capacitación al personal.
  • Cambiar el material de empaque y considerar cambiar de proveedor. Así mismo, reforzar la verificación al momento de recibir la mercadería.
  • Evaluar la afiliación a un servicio de delivery tercerizado o por aplicación.

De esta manera, con las razones a la vista (causas), la toma de decisiones llega a puntos “obvios”. Por consiguiente, marca la ruta de lo que se debe hacer para mejorar.