A menudo, los nuevos emprendedores pretenden alejarse del análisis de riesgo. Una cultura extremadamente optimista plantea que debe haber poca importancia a los aspectos negativos; y mucha menos importancia a las probabilidades de fallar.
No obstante, las grandes empresas saben cómo utilizar las probabilidades de fallo a su favor. Esto implica conocer todos los escenarios posibles (o calculables) al momento de tomar una decisión.
Gracias a esto, pueden ejecutar un análisis real que los prepara para elegir un camino a seguir en el futuro cercano. Y generalmente, una vez tomada la decisión, se cuenta con las herramientas necesarias para hacer frente a lo que se avecine.
¿En qué consiste el análisis de riesgo?
Un análisis de riesgo corporativo es un estudio detallado e imparcial sobre las probabilidades de que algo salga mal. Y con esto me refiero a todo escenario que se desvíe de la planificación empresarial.
Es uno de los aspectos más importantes de la planificación, pues la puesta en marcha de un plan sin la consideración de los riesgos suele llevar al fracaso. Además, la ausencia del análisis arrastra a la empresa a pérdidas inconmensurables.
Este estudio se puede clasificar en dos grupos y en cada uno se recurre a un conjunto de herramientas que permiten esclarecer la situación en cuestión. Estos grupos son los siguientes.
Análisis de riesgo cualitativo
En este caso, el análisis de riesgo empresarial es un modelo que pretende estudiar un caso partiendo desde un punto de vista descriptivo. Se crea a partir de conjeturas e interpretaciones, proyecciones sobre lo que podría suceder y puntos de vista muy específicos.
Para este tipo de análisis se recurre al conocimiento y la experiencia de personal con trayectoria en el área. Preferiblemente expertos en la materia que puedan aportar opiniones profesionales, imparciales y específicas.
Análisis de riesgo cuantitativo
Ahora bien, el otro lado de la moneda nos lleva a un análisis menos personal. El análisis cuantitativo recolecta datos concretos en formato numérico, por ejemplo, el porcentaje de probabilidad de que determinada variable se presente.
Todos estos datos se registran y organizan en herramientas estadísticas y gráficas que permiten observar directamente la situación en cuestión.
Los números no tienen opiniones personales, no creen que el proyecto vaya a fallar o a ser un éxito. Son lo que son y los datos hablan por sí solos. Por lo tanto, es recomendable realizar un análisis de riesgo cuantitativo luego de obtener una guía que surge del cualitativo.
De esa manera, la apreciación de las amenazas es mucho más precisa y, en consecuencia, la toma de decisiones es mucho más certera.
Herramientas básicas para el análisis de riesgo corporativo
Entendiendo qué es y por qué es importante realizar un análisis de riesgo de manera periódica en la empresa, es necesario acercarnos a algunas herramientas que te ayudarán en el proceso.
Si deseas que la planificación empresarial esté completa, lo mejor es que te apoyes en una o varias de estas herramientas.
- Matriz FODA
- Registro de riesgos
- Lluvia de ideas
- Montecarlo
- What if (Qué pasa si)
- Lista de chequeo
- Diagrama de causa y efecto