¿Sientes que tienes corazón de marketing?
Entonces te agradará profundizar en uno de los temas más apasionantes dentro de la mercadotecnia; el cómo comenzó todo, y por qué no, hacia dónde van las cosas.
Si deseas conocer la verdadera esencia de lo que es la publicidad y qué tan arraigada está en nuestra esencia humana, tienes que leer hasta el final.
Pero antes, períteme aclarar que actualmente no existe una teoría exacta que defina el punto de partida. Diversos autores plantean sus argumentos, y aun siendo diferentes coinciden en una gran verdad: la historia de la publicidad es antigua.
Hagamos un recorrido desde el punto más remoto hasta nuestros tiempos; veamos lo que se asoma en el futuro cercano y tengamos mayor conciencia de lo mucho que influye la publicidad en nuestra vida.
¿Listo para comenzar?
Primeras etapas de la publicidad
Algunos autores plantean fechas de 2000 y hasta 3000 años antes de cristo, como un punto importante en la historia publicitaria. La verdad, es fascinante asociar los documentos encontrados con una referencia del origen; pero incluso el documento más antiguo sería moderno cuando entendemos que la publicidad es parte de nosotros.
Por un parte, es asombroso que un documento del antiguo Egipto mostrara un pequeño enunciado publicitario. Difícil de imaginar a un hombre con esclavos hacer publicidad de su tienda de telas, pero está escrito, así que es real.
Sin embargo, eso no significa que marque una fecha de inicio de manera radical. Es decir, si nos enfocamos en ver el sentido de la publicidad misma, nos encontramos con que es:
Una manera de comunicar un mensaje relacionado a productos o servicios con intención de impactar a una audiencia con un propósito.
En ese sentido, el comercio depende directamente del éxito publicitario.
No quiero que pienses en esto asociándolo con banners, Ads interactivos, ni enlaces a landing pages; hablamos de comunicación en su estado más puro. Incluso cuando no había un lenguaje definido para la raza humana, es un hecho que debía existir publicidad para efectuar el intercambio de bienes ¿cierto?
Entonces estamos de acuerdo a que el verdadero origen de la publicidad se remonta al origen de la raza humana. Por supuesto, a medida que se fueron consolidando civilizaciones, la comunicación se fue unificando, y al mejorar el lenguaje, la publicidad comienza a enriquecerse.
Con el paso del tiempo, ahora se planteaban medios creativos para difundir un mensaje, profesar a las masas que existía algo que debían consumir por su bien. Pero de eso hablaremos en un minuto.
Por ahora, es necesario asimilar que mientras exista comunicación y un interés sobre el intercambio de bienes, existe publicidad; no es nuevo y dudo que se extinga con el tiempo. Es cierto que evoluciona, mejora y gana ventajas impresionantes aliada de la tecnología, pero honestamente, no podría decirse que estamos en el punto final de su desarrollo.
Cambios significativos en la historia de la publicidad
Evidentemente, cada vez que el hombre ha dado un salto evolutivo a nivel de herramientas tecnológicas, ha intentado optimizar las vías de comunicación. Somos seres con alto nivel de expresión e interacción, por lo tanto, es un hecho que siempre habrá dinamismo y reinvenciones sobre la manera en cómo nos comunicamos.
Por ejemplo, cuando nace la imprenta en 1453, se abre la posibilidad de plasmar el mensaje de interés en un material duradero que permitiría extender la vigencia del mensaje. A través de la difusión masiva de estos “carteles”, ahora se podría transmitir una idea a decenas de personas por vez.
El factor presencial por parte del anunciante entró en un segundo plano y por supuesto eso permitía un crecimiento exponencial en las estrategias publicitarias.
Posteriormente, con la invención de la radio, ahora el potencial logrado con el papel, se extendía más allá de las limitaciones geográficas comunes. Con una transmisión que ocupara un par de ciudades contiguas se lograba conectar con más personas con menos esfuerzo.
En efecto, no se descartó la publicidad impresa, sino que esta ganó un soporte adicional a través de la integración entre ambos.
Por otra parte, he de mencionar que antes de la revolución industrial, el enfoque publicitario apuntaba a la difusión de la información. Pero, cuando los productos comenzaron a producirse en serie, ahora era necesario que se incitara a que las masas los compraran.
De esa manera, se inicia el proceso para implementar el elemento persuasivo en los mensajes publicitarios. Dicho de otro modo, había más productos, ahora necesitaban que fueran comprados.
En ese sentido, la combinación de la imprenta y la radio, permitieron que los mensajes persuasivos se consolidaran en estrategias de outbound marketing. Era novedoso, y las personas ansiosas por que les dieran a conocer todo lo nuevo que estaba en el mercado para hacer sus compras. Definitivamente, un punto de auge para el desarrollo del comercio.
La publicidad de nuestra era
Con el éxito de las campañas publicitarias a nivel impreso y radial, no pasó mucho tiempo para que la publicidad saltara a la pantalla. Tanto en televisión como en cine, se fue tejiendo todo un ecosistema audiovisual que se fortalecía con el paso de los años y la renovación creativa.
Ahora con un esfuerzo concentrado en vender, los agentes publicitarios entendieron la importancia de encontrar alternativas que permitan presentarse de manera auténtica para ganar la atención de los consumidores.
Mensajes por censurar, difusión publicitaria a nivel nacional y un escenario más competitivo era lo que comenzaba a trabajarse en los años posteriores.
Sin embargo, la explosión publicitaria llegó de la mano del internet. La efectividad de la comunicación nunca había alcanzado el record que vivimos hoy; siendo hiperconectados, demandamos velocidad de respuesta, evitamos las intrusiones y queremos que se nos comunique solo lo necesario.
Razón por la cual, las marcas hacen uso de herramientas tecnológicas para conocer mejor a su audiencia y segmentar por rasgos específicos, a quién va dirigida la publicidad. Ciertamente puede ser un tanto confuso hacer un cambio de publicidad tradicional a publicidad digital, pero los beneficios no tienen comparación.
Gracias a internet, con menos recursos puedes llegar a compradores potenciales. Es decir, no solo a un conjunto de personas, sino a las más propensas a comprarte. Y ya esto se convierte en una solución para un mejor manejo de los recursos destinados a publicidad.
En ese sentido, nuestra era publicitaria está regida por tres elementos:
- Segmentación específica y personalizada
- Costos atractivos y controlables
- Mayor velocidad, impacto y resultado
El futuro cercano en la publicidad
Por supuesto que no pretendo ser un oráculo que presagia el porvenir. Sin embargo, al interpretar las señales que tenemos en frente, es posible entender el curso que están tomando las cosas; en este caso, hacia dónde se dirige la publicidad.
Mientras se siga trabajando en tecnologías que enriquezcan las experiencias comunicativas, habrá nuevos avances en la publicidad. Si damos un vistazo a los carteles impresos en el siglo pasado, no son ni la sombra de lo que hoy se puede hacer en Photoshop.
Así mismo, la producción de un spot hoy en día cuenta con mejores herramientas y el publicista cuenta con una mente más abierta. Lo que por supuesto se refleja en lo alucinantes que pueden ser los anuncios publicitarios dentro de la siguiente década.
Desde un plano básico, el modelado y animaciones marcan un cambio drástico en la publicidad digital de nuestros tiempos. Sin embargo, no es nada comparado con el concepto publicitario que justo ahora se desarrolla en Asia, donde hay pantallas holográficas que anuncian el último smartphone o un nuevo modelo de carros.
Podría decirse que justo ahora estamos en una encrucijada de creatividad y tecnología que hace que el potencial publicitario no tenga límites. Lo que significa que lo que hoy consideras ficción, podría ser una realidad en el futuro cercano.
Facebook ya está dando los primeros pasos en un metaverso, y estoy seguro de que los gigantes tecnológicos tomarán ese curso (si es que no lo están haciendo).
Evolución del consumidor y la publicidad
Ahora bien, si algo debemos tener en cuenta en la historia de la publicidad, es que el rol del consumidor ha ido evolucionando a la par de ella. Es decir, el buyer persona ha adoptado diferentes posturas a lo largo del tiempo, y evidentemente ha fomentado un ciclo evolutivo entre la expansión publicitaria y la demanda.
Veamos con dos ejemplos, de qué se trata esto.
En el auge de la revolución industrial, el consumidor no tenía idea de todo lo que podría estar allí afuera listo para ser comprado y consumido. Por ello amaba recibir información por todos los medios posibles para identificar qué podría comprar ahora.
Sin embargo, ahora es distinto. Los consumidores saben qué hay, en qué se está trabajando y dónde buscar información para mantenerse actualizados. Por ende, no hay tiempo para atender mensajes no relevantes.
El consumidor es más exigente con el tipo de contenido que consume y es más estricto con respecto a los permisos que otorga a cada marca. Ahora tiene el poder de rechazar y eso hace que la misma publicidad se vaya alterando para satisfacerlo y no espantarlo.
¿Comprendes la evolución cíclica y conjunta entre ambos? ¿Podrías identificar más ejemplos de esta combinación cliente-marca a lo largo de la historia de la publicidad?
Déjame un comentario y con gusto compartimos.