Es poco probable que mientras estés navegando a través de internet no te encuentres con anuncios sobre alguna marca personal. No importa en qué red social o qué motor de búsqueda estés utilizando en el momento; sé que si comienzas a tomar nota de todas las propuestas de nuevos proyectos, obtendrás una larga lista en poco tiempo.
Pero ¿Vale la pena desarrollar un personal branding para esta época?
Hay tantas opciones en el mercado, que cualquiera pensaría que ya no es necesario. Sin embargo, hay otras caras de las marcas personales que las convierten en uno de los puntos más importantes en las relaciones profesionales venideras.
En qué se basa el personal branding
En términos sencillos, el personal branding o marca personal es un conjunto de conceptos base que definen la personalidad y el propósito de tu presencia digital. Es decir, todos aquellos elementos que rigen la manera en cómo te conectas con determinada audiencia; y además, los factores que aseguran que tu manera de comunicarte sea única.
Lo que se pretende con ello, es que al igual que las marcas corporativas, puedas generar un alto nivel de recordación en un nicho particular. Dicho de otro modo, es posicionarte en la mente de determinada audiencia como referencia en algún campo.
Un ejemplo que ahora podemos denominar “clásico”, es la creciente ola de entrenadores Fitness. Cada uno con sus estrategias, filosofía, rutinas y hasta programas de suscripción, hacen uso de su marca para levantar una estructura de negocio.
Así mismo, cualquier tipo de persona puede construir un personal branding y comenzar a formalizar sus expresiones en los medios digitales. Y si te preguntas si es necesario, permíteme compartirte un rotundo Sí.
Qué gano haciendo una marca personal
Hace sólo una década, el tema de las marcas personales estaba reservado (tácitamente) para la farándula. Se desconocía el potencial que yace en el conocimiento y las experiencias de cada individuo; de pronto no sabes nada de comunicación social, pero eres experto en ingeniería industrial, y eso tiene un valor importante.
Gracias a los nuevos medios de comunicación, cualquier persona puede convertirse en embajador de su propio conocimiento. Si le da la connotación correcta, puede desarrollar una marca de nicho que a través de su conocimiento, resuelva problemas del sector.
Desde ese punto de vista, es necesario destacar que con una marca personal bien definida y trabajada, obtienen beneficios como:
- Carta de presentación 100% virtual y visible
- Alcance orgánico dentro de una audiencia
- Monetización del conocimiento y/o experiencia
- Oportunidades de mayor crecimiento profesional
- Interacción con audiencias calificadas
En ese sentido, el desarrollo del personal branding no es opcional si pretendes mantener viva tu actividad económica/profesional en los próximos 5 años.
Las comunidades ahora reconocen el valor de una persona que comparte sus experiencias de manera estructurada. Por ejemplo, es más sencillo y confiable buscar las referencias de un chef para hacer un almuerzo, que seguir la receta del empaque de un producto.
Por lo tanto, valiéndote de tus habilidades y lo que te apasiona, te sugiero comenzar a detectar esos elementos que le darán forma a tu marca. No obstante, evita perder tiempo y ajusta lo quesea necesario para que te sumes cuanto antes a esta ola de las marcas personales.