Directivos o líderes de proyecto deben lidiar con planteamiento y seguimiento de objetivos dentro de la empresa; forma parte de su rol y por ello deben manejar a la perfección los términos empresariales. De esta manera, pueden asegurar que las decisiones a tomar son las correctas.
Si estás en el ramo, estoy seguro de que habrás escuchado sobre los términos eficiencia y eficacia, pero si estás aquí, es porque deseas aclarar el significado de ambas.
A pesar de que ambos conceptos están relacionados con la productividad de cualquier proceso, hay detalles sutiles que los diferencian y marcan la brecha entre las distintas decisiones que le convienen a tu organización.
Acompáñame y descubre cuáles son.
Diferencias entre eficiencia y eficacia
Siendo dos términos tan similares, es normal que exista una confusión sobre qué aspectos pertenecen a cada uno y cuáles son sus principales diferencias. Distinguir los aspectos únicos de la eficiencia y eficacia es la base para mejorar el rendimiento de la empresa; al igual que las estrategias de crecimiento, contratación de personal, evaluación de proveedores, entre otros.
En el caso de la eficacia, solo se tiene en cuenta el cumplimiento de objetivos. Responde a preguntas cerradas sobre si algo se efectuó en el tiempo y con los recursos planteados. Dentro de la evaluación de performance, es en efecto, uno de los aspectos más importantes; mientras mayor eficacia, la consecución de objetivos permite forjar la misión de la empresa en pro de conquistar su visión o propósito.
Ahora bien, al hablar de eficiencia, las cosas toman un nuevo color. La excelencia no se trata solo de cumplir con las actividades y roles planteados, sino de mejorarlos y crecer constantemente. Es allí donde entra este concepto y hace referencia al uso óptimo de los recursos para desarrollar determinada actividad.
Permíteme ilustrarte un poco.
Imagina que evalúas a tres diseñadores en un proceso de admisión para tu agencia, cada uno recibe la tarea de desarrollar una pieza publicitaria y el resultado es el siguiente:
- El diseñador A no cumple con la calidad y excede el tiempo de desarrollo.
- Los diseñadores B y C manejan el mismo nivel de calidad y creatividad en la pieza. Sin embargo.
- B cumple perfectamente con el plazo, mientras C completa su asignación, 1 hora antes de lo solicitado.
B y C son los más adecuados para el trabajo, pero corresponde evaluar la eficiencia y eficacia. En este ejemplo, B es eficaz y C es eficiente.
¿Qué elegir entre eficiencia y eficacia?
Si es tu responsabilidad elegir entre ambos perfiles (siguiendo el ejemplo anterior), te sugiero pensar en lo siguiente. A mayor eficiencia, mayor margen de productividad, mientras que la eficacia solo garantiza que el plan se está llevando a cabo.
Los dos perfiles califican dentro de cualquier organización. Sin embargo, es recomendable optar primero por la eficiencia y tener profesionales eficaces como el mínimo permitido en la plantilla de trabajo. En otras palabras, asegúrate de que en tu equipo, el eslabón más débil sea eficaz; de esa manera aseguras tus planes, y mientras más profesionales eficientes, mejores avances obtendrás.