Estudiar con exactitud el comportamiento de los usuarios puede implicar procesos complejos; frecuentemente no basta con obtener los resultados de una encuesta dicotómica debido a que muchas veces, la realidad va más allá de un “Sí o No”.
¿La escala de Likert puede ayudar en este problema?
Si necesitas profundizar en las respuestas de tus prospectos, en efecto necesitarás herramientas que te permitan escudriñar cada uno de los aspectos que deseas evaluar. Una de ellas, es de hecho esta escala.
¿Quieres saber en qué consiste, cómo se utiliza y qué puedes lograr con ella?
Lee esta entrada hasta el final.
Escala de Likert – Qué es
La escala de Likert es un modelo de agrupación de respuestas predefinidas para ejecutar una encuesta. Bajo su esquema, se pretende ofrecer al encuestado, una gama impar de opciones que plantean el grado de acuerdo, satisfacción, frecuencia, probabilidad, entre otros.
La idea es que a cada pregunta o enunciado de interés se le aplique esta gama de opciones para que con una selección simple, el encuestado pueda manifestar su punto de vista con respecto al caso.
Por lo general, esta escala se compone de cinco, siete o nueve ítems conocidos como ítems de Likert. Estos establecen los extremos opuestos de una afirmación y en el medio de ambos se plantean puntos menos radicales para las respuestas; incluso es necesario establecer un punto medio conocido como el elemento neutro, el cual marca la diferencia entre lo favorable y desfavorable en el caso de estudio.
Gracias a esta herramienta, los investigadores no solo conocen la orientación del punto de vista de los encuestados (si están a favor o no). Adicionalmente permite explorar el grado de identificación con el enunciado o las preguntas.
Escala de Likert – Ejemplos y usos
Gracias a la versatilidad de la herramienta, es común encontrarla en diversas áreas donde por supuesto destaca la investigación de mercados. Debido a que es un modelo para presentar encuestas más sencillas y efectivas, es una de las herramientas favoritas de quienes deben dedicar grandes esfuerzos por entender el comportamiento de usuarios; por ejemplo psicólogos, educadores, ingenieros u otros.
Imagina que necesitas determinar la frecuencia con la que determinada población se interesa por adquirir nuevos gadgets. Bien puedes realizar la pregunta para que la muestra responda abiertamente; quizás reducirla al clásico “sí o no”, o utilizar la escala de Likert para facilitar el trabajo y obtener respuestas más precisas, por ejemplo:
- Muy frecuente
- Frecuente
- Ocasionalmente
- Pocas veces
- Nunca
De esta manera, guías al encuestado a través de un proceso de selección simple y al mismo tiempo puedes levantar datos cuantitativos sobre la intensidad de la respuesta.
Es cierto que para el procesamiento de las respuestas encontrarás dificultad para manejar la interpretación de los puntos medios. A pesar de ello, no se puede negar que con esta escala ahorras tiempo y logras un mayor grado de comprensión.
Por estos motivos, la escala de Likert debe ser incluida en tu modelo de encuesta. A estas alturas, seguro habrás notado que tanto en encuestas online como en encuestas presenciales, esta herramienta tiene un peso importante. Sabiendo esto ¿Qué esperas para utilizarla en tu investigación?