Los negocios relacionados a las artes suelen dar márgenes de ganancia bastante interesantes. Y si logras vincular el rubro artístico con la venta de mercadería, pues mucho mejor. Por ello, hoy quiero presentarte algunas ideas sobre cómo emprender en el negocio de la sublimación.
Este modelo de negocio es perfecto para quienes desean explorar diversos nichos y capitalizar el talento artístico. Es una de las ramas de las artes gráficas que más factura, y por ello nos tomaremos un tiempo para mirarla más de cerca.
¿Por qué pensar en el negocio de la sublimación?
Puedo asegurar que en algún momento te has topado con algún distribuidor de productos para sublimar. Ya sea por motivos de trabajo, o simplemente para satisfacer la necesidad de tener objetos personalizados.
Es muy común cuando se trata de hacer regalos, y si lo pensamos bien, cada día alguien en tu ciudad o país quiere dar un obsequio. Así que bien tú podrías ser el proveedor ideal y a novel B2C o B2B, adentrarte en un mercado de alta demanda.
Hoy en día, los usuarios aman la personalización, y tú puedes sacar provecho de ello.
Primeros pasos para iniciar tu empresa de sublimación
Para comenzar, debes saber que no basta con adquirir un combo de sublimación. En efecto, debes realizar todo un proceso de investigación para determinar el o los nichos que mejor te favorecen. Además, planificar el proceso logístico y todas las fases operativas de tu nuevo negocio.
Una vez que tengas el esquema de cómo funciona, debes considerar lo siguiente.
Proveedores y aliados estratégicos
Teniendo en cuenta qué tipo de recursos necesitas para comenzar a sublimar, puedes visualizar el tipo de proveedores y aliados que mejor te convienen. Al principio no necesitas lanzar la Gran Empresa, pero sí quieres prestar un buen servicio y ofrecer buenos productos, vas a necesitar proveedores y aliados de calidad.
Equipos e insumos
Por supuesto, para lanzar un negocio necesitas implementos, y en el caso de la sublimación, hablamos de las planchas transfer, prensas, moldes para tazas, gorras, chapas y demás. Además, debes adquirir un buen suministro de papel y tintas de sublimación que en efecto nos llevan a la adquisición de la impresora y un buen ordenador para trabajar las artes.
Taller
Si deseas trabajar de manera óptima, lo ideal es que acondiciones un espacio dedicado al negocio de sublimación. Concéntrate en habilitar un área que te permita trabajar el área creativa y una para la parte operativa.
De esta manera, habrá fluidez con respecto a los diseños y comodidad para el proceso de sublimado.
¡A sublimar y vender!
Ya con las bases hechas, el foco está en atraer a tus primeros clientes. Asegúrate de ofrecer un servicio de primera, donde el orden y el profesionalismo sean la base.
Si te concentras en tus clientes, seguramente aumentará la tasa de conversión y estos serán el puente para ampliar tu cartera mediante las recomendaciones. ¡A sublimar! Y, por supuesto, a proyectar tu negocio para un crecimiento consolidado.