Hace unos días, Burger King y la agencia We Believers lanzaron una impresionante y auténtica campaña, “México no artificial”, es una iniciativa que pone en primer plano los ingredientes naturales de la marca y está orientada al hombre común que devora hamburgueserías.
Según Adlatina, la agencia encontró que los consumidores mexicanos no se identifican con los modelos en los anuncios de diferentes marcas, debido a que la población mexicana es de ascendencia indígena y sus características son bastante diferentes a las modelos que son altos y de tez clara.
Por eso, los protagonistas del movimiento fueron poderosas fotografías en blanco y negro, tan diversas como la población de México. Es posible que sus poses no sean del todo elegantes o perfectas, pero sus semejanzas agregan fuerza a las afirmaciones de la campaña: «Lo real sabe mejor».
“De alguna manera, con este evento, hemos convertido a la gran ciudad de México, especialmente a la Ciudad de México, en un enorme museo de arte urbano que representa lo que realmente somos los mexicanos”, dijo el director creativo y cofundador de We Believers, Gustavo Lauria.
El programa consta de cientos de fotos que se han abierto paso en numerosos espacios publicitarios al aire libre en todo México.
Las imágenes del evento forman parte de una exposición en el Archivo del Museo de Fotografía.
A través de la campaña, Burger King aumentó su » brand awareness » en un 95 %, aumentó la positividad sobre su marca en un 98 % y aumentó las ventas en suelo mexicano en un 36.7 %.