Google había sostenido durante meses que la web “está prosperando” y que el crecimiento de la inteligencia artificial no afectaba el tráfico online. Sin embargo, en un documento presentado ante la justicia estadounidense, la compañía reconoció que “la web abierta ya está en rápido declive”, de acuerdo con un reporte de The Verge.
La admisión surge en el marco del proceso antimonopolio que enfrenta por su negocio de publicidad digital. El Departamento de Justicia de EE. UU. propone dividir sus operaciones publicitarias, pero Google asegura que una medida de ese tipo solo aceleraría la caída de la web abierta, perjudicando a editores que dependen de la publicidad display.
El impacto de la inteligencia artificial y los nuevos formatos
Según The Verge, Google argumentó que el ecosistema publicitario atraviesa una transformación impulsada por la inteligencia artificial y por formatos como la televisión conectada y el retail media, que desplazan a la publicidad tradicional en sitios web.
Este escenario ha generado preocupación entre editores y dueños de portales, quienes reportan caídas de tráfico asociadas tanto a cambios en el algoritmo de Google Search como al uso creciente de chatbots de IA.
La respuesta de Google a las críticas
En declaraciones a The Verge, la vocera de la compañía, Jackie Berté, afirmó que se trató de “una línea sacada de contexto”. Según su versión, la referencia de Google apuntaba únicamente al “declive de la publicidad display en la web abierta”, y no a la web en su totalidad.
Una industria en transición
La diferencia entre el relato público y lo expresado en tribunales deja en evidencia la tensión que atraviesa la industria digital. Mientras Google intenta defenderse de las acusaciones de monopolio, medios y publishers buscan adaptarse a un panorama en el que la IA y nuevos formatos publicitarios ganan terreno sobre los modelos tradicionales.