En la web, todo es rastreable. ¿Qué mejor manera de entender lo que tu cliente busca, quiere y detesta, que acercándote a lo que hace en tu web?
Gracias a herramientas como Google Analytics, puedes obtener un vistazo detallado del comportamiento de tu audiencia en tu tienda. Menos ventas, menos clientes o mucho rebote, son algunas de las cosas más importantes.
Además, monitorear el avance dentro de la planificación te dará luces de lo que estás haciendo bien. Al final, debemos ajustar lo que no sirve y perfeccionar lo que da mejores resultados, pero ¿cómo saberlo?
¡Midiendo!
Por eso, sin importar el tamaño de tu tienda, debes aprender a manejar las métricas de Google Analytics para ecommerce. Quizás al principio sea un poco confuso, pero en poco tiempo le sacarás mucho provecho.
¡Veámoslo!
Principales métricas de un ecommerce
Al igual que los comercios físicos, las tiendas online deben llevar un estricto registro contable. En este aspecto, detalles como:
- Ventas
- Stock
- Audiencia
- Precios
- SKU más vendido
Son cruciales para definir estrategias en el futuro cercano.
Ahora bien, en el entorno digital, estos aspectos están estrechamente relacionados con otras variables como:
- Fuente de tráfico
- Nuevos usuarios
- Tasa de rebote
- Tasa de conversión
- Tasa de abandono
- Coste por adquisición
- Tasa de permanencia
- Tasa de salida
- ROI
- Otros
Y créeme, cada uno tiene su grado de importancia. Pero antes de que tu cabeza comience a dar vueltas, déjame decirte que es más sencillo de lo que crees. Además, con Google Analytics aprenderás a extraer estos datos de manera simple.
Para entender cómo podemos organizar estas métricas, es necesario agruparlas, y acá te dejo una manera práctica de hacerlo.
Métricas de audiencia
Recuerda que el centro de tu estrategia ha de ser el cliente, por ello, lo primero que debes analizar es la audiencia. En este filtro, es crucial que identifiques aspectos como
Fuente de tráfico
Gracias a los rastreadores web, puedes identificar si el usuario proviene de una red social, web, buscador, o algún anuncio específico. Esto te permite conocer los intereses de búsqueda del usuario.
Usuarios
Cada vez que alguien llega a tu web y le das a comer una galleta, podrás reconocerlo cada vez que entre a tu web. Ciertamente estas galletas actúan solo desde un mismo dispositivo, pero te dejan saber un estimado de la cantidad de usuarios nuevos y recurrentes en tu sitio.
Permanencia y rebote
Personalmente, considero que tanto la tasa de permanencia como la de rebote te ayudarán a especificar qué tanto le agradas a tu buyer persona. Si el usuario ni siquiera interactúa con tu web, posiblemente haya que ajustar elementos en la interfaz; mientras que si navega de manera fluida, habrás captado su interés.
Métricas comerciales
Por otra parte, incluso quienes detestan sacar cuentas, tienen un interés particular por este tipo de métricas. Pues con un negocio, lo que más nos interesa saber es cómo se traduce lo que hacemos o dejamos de hacer en dinero.
En ese sentido, Google Analytics para eCommerce te permite acceder a un conjunto de datos que te ayudarán a entender el performance de tu tienda.
Ventas / Conversión
Estás dos métricas te permiten conocer la relación entre el tráfico y los ingresos. Es cierto que en el comercio electrónico, los ratios de conversión son relativamente bajos; pero masificando estrategias de atracción, un pequeño porcentaje puede significar sumas importantes de dinero.
Ticket promedio
En este caso, el ticket promedio es una media del valor de compra realizado por todos los usuarios de una segmentación definida; ya sea por tiempo, geolocalización, u otro parámetro, puedes saber un estimado de lo que puede facturar una persona con determinadas características.
Tiempo de vida del cliente
Conocido como el LTV (life time value), establece un espacio de tiempo en el que un mismo cliente representa facturaciones activas. Cuando hay fidelización de audiencias, puedes prolongar el LTV, de manera que con lo invertido para atraerlo en un inicio, sigue generando beneficios.
ROI
En efecto, todas las acciones de marketing (incluso las medidas orgánicas), requieren inversión de recursos. Por lo tanto, saber si están dando el resultado adecuado o no ayudará a tomar decisiones sobre la estrategia.
Conforme a ello, el retorno sobre la inversión es una de las métricas para ecommerce más importantes.
Costo por adquisición
Finalmente, debes tener en cuenta el costo por adquisición. Determinar cuánto debes invertir en tiempo y dinero para tener un nuevo cliente te ayudará a definir la rentabilidad de tu ecommerce.
Ignorar esta métrica, es trabajar a ciegas. Si por ejemplo, determinas que cada mes, invirtiendo $300 en atracción, conviertes a 4 nuevos clientes con LTV de 3 meses; y a su vez, cada mes el ticket promedio es de $100 ¿Es rentable?
¡Por supuesto! Y como consecuencia, debes establecer un mínimo de inversión mensual que considere estas cifras ¿no lo crees?
Cómo manejar las métricas dentro de Google Analytics
Algo que siempre me ha gustado de Google es su intención de ofrecer soluciones a expertos y a novatos en distintas áreas digitales. El caso de Google Analytics no es una excepción.
La interfaz es bastante simple, y ahora que conoces las métricas para ecommerce de mayor relevancia, puedes identificar rápidamente cómo acceder a ellas. Quizás, lo más interesante de esta herramienta, es que todas las funciones analíticas están segmentadas por categorías.
Además, la navegación por cada sección de la plataforma es sencilla, e intuitiva. Y no conforme con ello, ofrece gráficas amigables para interpretaciones rápidas y sin complicaciones.
No obstante, si quieres perfeccionar el tipo de análisis, puedes integrar esta herramienta con otras de Google u otras plataformas. En efecto, mientras más detallada quieres que sea la información, deberás especificar ciertas consideraciones que demandan un uso profesional de la herramienta.
Aun así, cualquier emprendedor que esté iniciando su ecommerce puede adaptarse rápidamente a las funciones principales. Gracias a ello, las métricas para ecommerce dentro de Google Analytics serán relativamente fáciles de manejar; por lo que tu negocio no tendrá por qué perderse sus beneficios.