Nadie que trabaje en marketing digital querría que se filtren sus contraseñas de SEMrush, sus credenciales de WordPress, o las claves de acceso a las redes sociales de sus clientes. Peor aún sería que nuestros sistemas sufrieran un hackeo en el que se vieran afectadas nuestras tarjetas de crédito y otros datos bancarios. Por eso resulta esencial contar con las mejores herramientas de ciberseguridad para prevenir estos ciberataques.
Además de familiarizarnos con el manejo de las principales plataformas y herramientas digitales de marketing, es fundamental que tengamos buenos conocimientos en materia de ciberseguridad y que desarrollemos los mejores hábitos para proteger nuestras cuentas y dispositivos. Por eso, las siguientes cuatro herramientas de seguridad digital no pueden faltar en nuestra computadora y en nuestro celular:
1. Una VPN
Con una VPN podemos cifrar el tráfico de internet de nuestros dispositivos para prevenir cualquier posible filtración de datos. Este cifrado robusto se encarga de proteger las contraseñas de todas las plataformas digitales a las que accedemos a diario, además de nuestros datos de pago cuando hacemos compras online, y, por supuesto, todas nuestras comunicaciones con nuestros clientes.
Las VPN nos permiten además proteger nuestra IP para que no quede expuesta mientras navegamos, de manera que previenen posibles ataques DDoS lanzados contra nuestra empresa. ¡Y no solo eso! Con una VPN también podemos acceder a mejores precios en la compra de pasajes de avión o reservas hoteleras, en el caso de que tengamos que viajar por motivos de trabajo.
Cuándo usarla. Si no sabemos cómo utilizar una VPN, ¡no pasa nada! Es fácil. Solo necesitamos mantenerla operando en segundo plano para garantizar la seguridad de nuestros datos.
2. Una herramienta anti-malware
De manera similar, resulta impensable trabajar con computadoras que no estén protegidas frente al malware con un antivirus o una herramienta anti-malware similar. Algunas VPN incluyen herramientas anti-malware en su propia suite, lo que nos permite usarlas como herramientas de seguridad digital todo-en-uno. Si este no es el caso de tu VPN, puede ser buena idea optar por otra distinta, o contratar tu antivirus de manera separada.
Los antivirus pueden detectar todo tipo de amenazas contra el software de nuestros dispositivos, incluyendo posibles infecciones de ransomware capaces de cifrar todos nuestros archivos y exigirnos un rescate a cambio de liberarlos. Sin embargo, los antivirus por sí solos no son una garantía de ciberseguridad suficiente, así que deben estar acompañados por otras herramientas de ciberseguridad y por buenos hábitos digitales.
Cuándo usarla. Una herramienta anti-malware también debería estar operativa en segundo plano siempre que estemos trabajando con la computadora o el celular.
3. Un gestor de contraseñas
Las contraseñas están pasando a ser uno de los grandes dolores de cabeza de los especialistas en ciberseguridad. Cada vez usamos más plataformas digitales para desarrollar nuestro trabajo, y, de hecho, el marketing es uno de los sectores más expuestos a la multiplicidad de cuentas online. Un exceso de cuentas puede conllevar una cierta relajación a la hora de elaborar las contraseñas para proteger cada una, disparando los riesgos de sufrir un hackeo.
Resulta casi imposible memorizar decenas o incluso cientos de contraseñas complejas para gestionar nuestras cuentas a diario. Por eso, un gestor de contraseñas es la herramienta que necesitamos para poder almacenar todas estas claves de manera segura. Además, los gestores de contraseñas nos alertarán en caso de que alguna de nuestras plataformas haya filtrado nuestros datos, y protegerán nuestras claves frente a los keyloggers.
Cuándo usarlo. Los gestores de contraseñas también operan en segundo plano, y se activan de forma automática cuando accedemos a cualquier plataforma digital.
4. Un navegador seguro
Finalmente, deberíamos trabajar siempre con uno o varios navegadores seguros, sobre todo si necesitamos visitar una gran cantidad de webs a diario como parte de nuestro trabajo. Cada web que visitamos está lista para llenar nuestra computadora con cookies que no solo pueden rastrear nuestra actividad online, sino que además pueden suponer importantes riesgos para nuestra seguridad digital.
Mantener nuestra actividad personal en un navegador y nuestra actividad profesional en otro es una buena manera de minimizar riesgos, pero estos riesgos serán todavía menores si además utilizamos navegadores robustos. Chrome y Safari pierden aquí bastantes puntos frente a alternativas más robustas como Firefox, Brave o Iridium, navegadores que están especialmente diseñados para proteger nuestra privacidad.
Cuándo usarlo. Siempre que visitemos una web deberíamos hacer uso de un navegador robusto. Además, conviene tener más de uno para separar nuestras actividades online.
El sentido común y la prudencia, nuestros mejores aliados
Estas cuatro herramientas de ciberseguridad deben estar presididas siempre por la más importante de todas: nuestro sentido común. Buena parte de los hackeos terminan produciéndose por comportamientos irresponsables de los usuarios afectados, así que debemos asegurarnos de ser prudentes en la red y evitar riesgos innecesarios.
No visitar webs sospechosas, no descargar software ilegítimo, no compartir nuestras contraseñas con otras personas, no dejar nuestra computadora desatendida en un café… Estas y otras medidas de sentido común nos ayudarán a mantener nuestros dispositivos y nuestras cuentas a salvo para prevenir disgustos en nuestra actividad profesional.